La Asociación Española de Investigación sobre el Cáncer denuncia que algunas medidas recientemente anunciadas por la Agencia Estatal de Investigación representan meros cambios cosméticos que no cambian para nada los aspectos más negativos que el nuevo Calendario de Proyectos de la AEI infringe a la mayoría de investigadores de este país.
Madrid, 07 de enero de 2020. Tras la denuncia realizada por la Asociación Española de Investigación sobre el Cáncer (ASEICA) sobre las consecuencias negativas que se cernían sobre el sistema científico español por culpa del calendario de convocatorias de proyectos de investigación anunciado este año por la Agencia Estatal de Investigación (AEI), la AEI respondió en los medios indicando que “se garantizaba el apoyo a aquellos grupos que puedan quedarse temporalmente sin financiación” y, al mismo tiempo, negando que la adaptación al nuevo calendario supusiese una pérdida de financiación por los grupos.
En relación a nuestras demandas, la AEI ha publicado el día 30 de diciembre una nota de prensa en donde se actualizaba la planificación de las convocatorias de la AEI y donde se establecen otras medidas de flexibilización en la fecha de inicio de algunos proyectos de la convocatoria de 2019 (este documento puede verse en el siguiente link de la AEI: http://www.ciencia.gob.es/stfls/MICINN/AEI/ficheros/Planificacion_final_Plan_Estatal_.pdf).
ASEICA considera que dichas medidas son claramente una cortina de humo que solo contiene medidas vacuas y sin contenido real. Según apunta el Dr. Xosé R. Bustelo, presidente de ASEICA, “Esta es una decepción más. Estábamos a la espera de medidas positivas por parte de la AEI tras su comunicado reciente, pero se sigue con la política del avestruz de no recocer el problema que ellos mismos han creado”.
Como denunció ASEICA recientemente, el nuevo calendario conlleva retrasos muy pronunciados en el comienzo de los proyectos de investigación en las desde el 1 de enero habitual a junio de 2020. Dado que la AEI no ha contemplado financiación puente para cubrir este desfase, ello significa que los grupos de investigación que han optado a estas ayudas estarán sin financiación un mínimo de 5 meses. Esto equivale a un recorte efectivo de la financiación de los proyectos de un 14%. Dado que la financiación actual de proyectos de investigación está a niveles de hace 15 años, esto supondrá una merma muy importante de recursos para todos los grupos de investigación. Esto es, un tercio del total de investigadores que se benefician en el país de estas ayudas. “Estos problemas, según apunta el Dr. Bustelo, siguen ahí tras los nuevos cambios en el calendario de proyectos anunciados el día 30 por parte de la AEI”.
Como denunció previamente ASEICA, estas medidas van a suponer que dos tercios de los grupos de investigación españoles pierdan como mínimo 5 y 8 meses de financiación en los años 2020 y 2021, respectivamente. Esto conlleva, a su vez, recortes efectivos próximos al 14 y 22% en dichos años en la financiación de los proyectos de investigación asociados al Plan Nacional.
Entre los nuevos cambios anunciados por parte de la AEI, se incluye la posibilidad de que los investigadores a los que se les haya concedido el proyecto en el 2020 puedan pedir que este se inicie el 1 de enero en vez de en junio. Sin embargo, esta medida no va asociada al aumento de una financiación compensatoria, con lo cual lo único que conllevará es que se tenga que estirar el chicle de la financiación contemplada para 36 meses a 41 meses. Aunque al menos esto permitirá pagar facturas atrasadas a los grupos, esta medida confirma la denuncia previa de la ASEICA de que la adopción del nuevo calendario conllevará pérdidas importantes en la financiación de los grupos. Y, lo que es más preocupante, la medida de “atrasar el calendario” de inicio de los proyectos al 1 de enero no se contempla en el caso de los investigadores que empiecen su proyecto en el 2021. Según el Dr. Bustelo, “esto es difícil de entender puesto que los grupos de esta convocatoria tendrán un agujero carente de financiación de 8 meses según el calendario previsto por al AEI”.
Otra de las medidas anunciadas, que ya estaba llevándose a cabo en la actualidad, es la receptividad de a AEI a otorgar “prórrogas” en la ejecución de los proyectos actualmente en curso para que los grupos puedan sufragar el tiempo que estarán sin financiación hasta que comiencen los proyectos de investigación nuevos. Esta medida supone el reconocimiento de forma implícita por parte de la AEI de que la falta de corrección del calendario dará lugar a un recorte en la financiación de los proyectos. Además, según el Dr. Bustelo, “esta medida crea una situación kafkiana, puesto que las prórrogas aludidas por parte de la AEI se tienen que solicitar no porque se necesite una financiación puente para cubrir el agujero sin financiación de los grupos. Al revés, la AEI fuerza a los científicos a que dichas prórrogas se soliciten aludiendo problemas científicos en la ejecución de los proyectos previos. Resumiéndolo en pocas palabras, la AEI nos fuerza a pedir prórrogas haciéndonos mentir sobre las razones reales por la que las tenemos que pedir”.
En todo caso, tal como denunció ASEICA repetidamente, el problema real sigue siendo el mismo tal como apunta el Dr. Bustelo: “pidiendo prórrogas de los proyectos vigentes o pidiendo un cambio en la fecha de inicio de los proyectos nuevos, el resultado final es que los grupos tendrán un 14% y un 22% menos de financiación real en el año 2020 y 2021. Y, de no seguirse corrigiendo la situación, es previsible que esta medida afecte también a los grupos que comiencen sus proyectos en el año 2022. Un verdadero desastre”.
La propia AEI ha reconocido que ese hueco de cinco meses sin financiación que denuncian los científicos españoles supone “una clara anomalía y un perjuicio para la mayoría de la comunidad científica”. Ante las denuncias previas de ASEICA, la AEI también ha asegurado en sus comunicados contra las denuncias de ASEICA de que tiene contempladas medidas para apoyar a los científicos españoles que se queden sin financiación. Estas medidas, sin embargo, siguen sin concretarse, por lo que es difícil saber el alcance de las mismas. En estos momentos, como apunta el Dr. Bustelo, “no sabemos qué tipo de apoyo se contempla, si éste va a ser moral o material, si son hechos o son mera palabrería”.
Desde ASEICA se demanda que la AEI abandone la política de echar balones fuera y anuncie ya cuáles serán dichas medidas de apoyo. De no cumplirse el compromiso público realizado por la AEI, la ASEICA no tendrá más remedio que pedir la dimisión de su director por mentir a los científicos y a la sociedad española.
Entre estas medidas paliativas que ya propuso ASEICA se encontraban la adopción del calendario de forma progresiva para evitar periodos tan grandes sin financiación de los grupos, la adopción de financiación puente para cubrir dichos periodos y otras varias. Pese a que esto fue una demanda general de las sociedades científicas, la AEI se ha negado por el momento a poner en marcha cualquiera de estas medidas.
ASEICA reta a la AEI a que explicite, claramente, las medidas que ha indicado para “garantizar el apoyo a aquellos grupos que puedan quedarse temporalmente sin financiación”. ASEICA sigue insistiendo que, de no corregirse, esta situación supondrá una parálisis de proyectos de investigación y un quebranto serio a la competitividad de los investigadores españoles en el contexto internacional.
De no revertirse esta situación, ASEICA advierte la inacción de la AEI conllevará ralentizaciones en los proyectos de investigación, pérdidas de contratos de investigadores y un serio quebranto a la competitividad de los investigadores españoles en el contexto internacional. Esto afecta, sin excepción, a todos los ámbitos del conocimiento.
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